Pan con Ajo Casero -

Pan con Ajo Casero

Tiempo de preparación: 10 minutos | Tiempo de cocción: 10 minutos
Tiempo total: 20 minutos | Calorías: 180 kcal por porción | Raciones: 4

Ingredientes:

🥖 1 barra de pan tipo baguette o chapata
🧄 4-5 dientes de ajo (picados finamente)

🧈 100 g de mantequilla sin sal (a temperatura ambiente)
🌿 2 cucharadas de perejil fresco (picado finamente)
🧂 Sal al gusto

🧀 Opcional: queso parmesano rallado o mozzarella para gratinar

Instrucciones para preparar:

Preparar el pan:

Comienza eligiendo una barra de pan adecuada. Las baguettes y las chapatas son ideales por su corteza crujiente y su interior suave. Corta el pan en rebanadas de aproximadamente 2 cm de grosor, pero sin llegar a cortarlo completamente, de manera que las rebanadas sigan unidas por la parte inferior.

Preparar la mantequilla de ajo:

En un bol, mezcla la mantequilla a temperatura ambiente con los dientes de ajo picados finamente. Esto asegurará que el ajo se mezcle bien con la mantequilla, permitiendo que su sabor se distribuya uniformemente por todo el pan.
Añade el perejil fresco picado, un toque de sal y, si lo deseas, una pizca de pimienta negra para darle un extra de sabor.

Untar el pan:

Con una espátula o cuchillo de mantequilla, unta generosamente la mezcla de mantequilla de ajo entre cada rebanada de pan. Asegúrate de cubrir bien cada corte para que el sabor penetre en el interior del pan.
Si eres amante del queso, este es el momento para espolvorear un poco de queso parmesano o mozzarella rallado entre las rebanadas o encima del pan.

Hornear:

Precalienta el horno a 180°C (350°F).
Coloca el pan en una bandeja para hornear y cúbrelo ligeramente con papel de aluminio. Esto ayudará a que el pan se caliente sin que se queme demasiado rápido.

Hornea el pan durante unos 10 minutos. Si prefieres un acabado más crujiente, retira el papel de aluminio durante los últimos 2-3 minutos para que la parte superior del pan quede dorada y crujiente.

Servir:

Retira el pan del horno y deja que se enfríe ligeramente antes de servir. Si optaste por añadir queso, asegúrate de que esté derretido y burbujeante para disfrutar de una textura deliciosa y cremosa con cada bocado.

Consejos adicionales:

Variedad de hierbas: Puedes experimentar con otras hierbas frescas como albahaca, orégano o tomillo, dependiendo del perfil de sabor que prefieras.
Ajo asado: Si prefieres un sabor más suave, prueba asar el ajo antes de mezclarlo con la mantequilla. El ajo asado tiene un sabor más dulce y menos intenso que el ajo crudo.
Aceite de oliva: Si quieres una versión más ligera, reemplaza la mitad de la mantequilla con aceite de oliva virgen extra. Aportará un toque más mediterráneo y saludable a tu pan de ajo.

Agregar un toque picante: Para los amantes del picante, añade una pizca de hojuelas de chile rojo a la mezcla de mantequilla de ajo para darle un toque extra de sabor.
Queso extra cremoso: Para una versión aún más indulgente, prueba mezclar la mantequilla con un poco de crema de queso antes de añadir el ajo y el perejil. Esto hará que la mezcla sea aún más cremosa y rica.
Versión al grill: Si tienes una parrilla o un horno con función grill, puedes tostar el pan durante los últimos minutos bajo el grill para obtener un acabado ultra crujiente y dorado.

Variantes de Pan de Ajo:

Pan de ajo con pesto:

En lugar de solo mantequilla de ajo, puedes hacer una mezcla de pesto casero o comprado con mantequilla. El sabor fresco de la albahaca y los piñones añadirá una nueva dimensión al tradicional pan de ajo.

Pan de ajo relleno:

Rellena las rebanadas del pan con ingredientes como jamón, pepperoni o rodajas de tomate antes de hornear. Además de la mantequilla de ajo, tendrás un delicioso aperitivo con rellenos variados y sabores únicos.

Pan de ajo con aceite de trufa:

Para un toque más gourmet, rocía el pan de ajo con un poco de aceite de trufa antes de hornearlo. La trufa añadirá un sabor terroso y sofisticado que elevará tu pan de ajo a otro nivel.

Pan de ajo con hierbas y limón:

Añade un toque de ralladura de limón a la mezcla de mantequilla de ajo para darle un toque fresco y cítrico. Esta variante es perfecta para acompañar platos de pescado o mariscos.

Cómo acompañar tu pan de ajo:

Platos italianos: El pan de ajo es el complemento perfecto para platos de pasta como espaguetis a la boloñesa, lasaña o carbonara. Su sabor y textura equilibran las salsas ricas de estos platos.

Sopas: Sirve tu pan de ajo junto a una sopa de tomate o minestrone. El pan crujiente es perfecto para mojar en las sopas y añadir más sabor a cada bocado.
Ensaladas: Un pan de ajo ligero y crujiente puede complementar una ensalada fresca de rúcula con tomates cherry, aceitunas y queso feta.
Aperitivo: El pan de ajo por sí solo puede ser un excelente aperitivo. Sírvelo junto con una selección de salsas como hummus, tapenade o salsa de tomate para que los invitados lo disfruten antes del plato principal.

Conservación:

Si te sobra pan de ajo, puedes envolverlo bien en papel de aluminio y conservarlo en el refrigerador durante hasta 2 días. Para recalentarlo, simplemente colócalo en el horno a 150°C durante unos minutos hasta que esté caliente nuevamente.
También puedes congelar el pan de ajo antes de hornearlo. Para ello, prepáralo como se indica en la receta, envuélvelo en papel de aluminio y congélalo. Cuando quieras disfrutarlo, hornea directamente desde el congelador añadiendo unos minutos al tiempo de cocción.

Este pan con ajo casero es una receta sencilla pero llena de sabor, perfecta para acompañar casi cualquier comida. Su preparación es rápida y permite múltiples variaciones para adaptarse a tus gustos personales. Ya sea que lo disfrutes como aperitivo, acompañante o incluso como plato principal en una comida ligera, este pan de ajo siempre será una delicia que complacerá a todos en la mesa.